otros pensaban que se pasaba de vivo,
lo cierto es que ninguno dudaba
de haberlo visto, corriendo.
Unos dias estaba en el parque,
otros estaba en la plaza,
cuando llovia, nadaba en la fuente,
y los dias soleados debajo de un puente.
Muchos pensaban en quien habia sido,
un cruel capitan o un triste guerrero,
un habil corsario o un fiel marinero,
temible asesino o un buen panadero.
Brincaba y reia, mas nunca dormia,
algunos pensaban que nunca se iria,
mas llego un buen dia que todos recuerdan
como el dia en que el muerto se fue de parranda.
Jamas regreso y de el ya no se sabria,
pero dicen que el 1 y 2 de noviembre,
se escuchan sus risas y un grito de muerte
que dice “bendito el tequila y que viva mi gente!”.
.
Ohhh, a eso le llamo un poema que rima muy acorde al día de muertos.
A comer PIB, provecho!